El dolor en espejo es un dolor experimentado en ambos lados del cuerpo, generalmente después de un traumatismo o inflamación en una extremidad de un lado. Sin embargo, el dolor en el lado opuesto al área afectada no suele ser tan intenso como el del lado lesionado. Los dolores de espejo se han documentado durante bastante tiempo. Y este tipo de dolor se ha documentado después de una lesión o después de una inflamación de los nervios periféricos. También se experimenta en estados de dolor crónico como CRPS/RSD (Síndrome de Dolor Regional Complejo/Distrofia Simpática Refleja).
Explicar el dolor del espejo siempre ha sido un desafío. Diferenciar entre el dolor muy “real” del miembro traumatizado versus el dolor reflejado en el contrario, no es un concepto sencillo de entender para cualquiera. ¡E imagine la angustia, la preocupación y el pánico total de un paciente cuando comienza a pensar que su problema/lesión ahora se estaba extendiendo al otro lado, aparentemente fuera de control!
Hasta ahora, la investigación muestra que los dolores en espejo tienen una base en el sistema inmunológico. Cuando la respuesta nerviosa para un paciente con dolor crónico o traumático es la inflamación en el área del nervio, con posibles efectos secundarios en la piel y la circulación, cuanto mayor sea el dolor y la inflamación, mayor será la probabilidad de que la respuesta sea reflejada por el cuerpo en el lado opuesto. lado. Parece que con el dolor nervioso se activa la actividad de las células gliales y/o de las citocinas proinflamatorias, luego entra en acción el sistema autoinmune. Asimismo, si se puede revertir esta sobreactividad, la reacción se calma.
También ha habido algunos hallazgos interesantes relacionados con cambios en la sensación en la extremidad, en estos casos, y áreas de dolor de espejo. Por ejemplo, se ha observado una función sensorial anormal bilateral (cómo responde el paciente al tacto) en pacientes con dolor neuropático unilateral (de un solo lado). En una escala más pequeña, ¡esto se ve incluso en la odontología tradicional! Algunos dentistas informan que los dientes normales en el lado opuesto de los dientes enfermos demostraron umbrales mecánicos y de dolor más bajos.
El dolor del espejo ahora se considera razonablemente común. Básicamente, su cuerpo, en respuesta a su lesión y todas las circunstancias que la rodean, ha llamado a sus sistemas nervioso e inmunológico, sistemas que están destinados a cuidarlo, han determinado que le vendría bien un poco más de sensibilidad y protección. Como resultado, producen productos químicos para hacer eso. Y, dado que no hay “cercas” en el sistema nervioso, estos químicos pueden filtrarse y esparcirse por el cuerpo. Como resultado, esto activa y sensibiliza los nervios del lado opuesto de la línea divisoria de su cuerpo: la médula espinal. Y, cuando esto sucede, los nervios asociados con el lado opuesto de su cuerpo pueden disparar poderosas señales de peligro. El cerebro los usa para construir una experiencia de dolor reflejada. Piense en ello como si nuestro cerebro quisiera mantenerlo el doble de seguro. ¡Hace que te duela el doble para transmitir realmente el mensaje!
La clave es que, si sientes que esto, el dolor del espejo, podría estarte pasando, no entres en pánico. Programe un tiempo para hablar con su médico. Hay cosas que pueden ayudar a calmar su sistema, muchas no relacionadas con los medicamentos.